junio 12, 2009

Recordando el 2009

Pronto cumpliré 75 años. Ya es toda una vida.

No sé por qué pero irremediablemente cada vez que cumplo años, me he remitido involuntariamente a 2009.

Aquél fue el año que dejé de vivir en Mexicali, todavía lo recuerdo bien. Crucé casi el país entero en la camioneta de mi mejor amigo. Fue un mes antes de mi cumpleaños número 25.

Ese fue el año en que conseguí mi primer trabajo en la ciudad de México, quién iba a decir que 10 años, después de estar hundiéndose poco a poco la ciudad iba a colapsar sobre sí misma y se iba a hundir por culpa de la extracción indiscriminada de agua de los mantos acuíferos. Me alegró el hecho de vivir lejos de allí, pero saber que la mayoría de todos mis amigos (sino es que todos) estaban a 50 metros bajo la tierra -se encontraron partes donde la profundidad llegó a los 150- fue un durísimo golpe a mi ya de por sí destruído espíritu.

También fue el año en que ocurrió la primera de 5 pandemias de Influenza humana. Fue la más ligera, murieron menos de 500 personas. Ya han pasado más de 30 años de la gran pandemia del 25 y aún no se recupera de eso. Mil millones de personas murieron. El mundo estaba a un paso del colapso. Las autoridades sanitarias no lograban contener la cepa que mutó aquél año. Sus vacunas ya no servían, la gente se volvió paranóica, las fronteras se cerraron. Lo bueno fue que México no fue afectado tanto como los países europeos, donde agruparon los cadáveres en los pisos cuando las morgues se llenaron.

Si mal no recuerdo, fue también la última vez que México intentó ir a un mundial. Miles de personas se suicidaron en masa por que la selección no pasó. Al año siguiente 4 estadios fueron dinamitados simultáneamente en un ataque terrorista sin precedentes. Estaban llenos, miles de personas murieron. Muchas especulaciones sugirieron que los culpables fueron fánaticos que se volvieron extremistas tras el fracaso rotundo de su selección el año anterior. El caos que siguió a estos sucesos sumió al país en una crisis de la cuál no se recuperó por años. Aún hoy, yo siento que no se ha superado del todo.

Dos años después Israel fue borrada del mapa. Al parecer las naciones árabes sí tenían ADM después de todo. Nadie se volvió a meter con ellos, hasta el estallido de la gran guerra del 2032, donde Irak, Palestina, Libia, Paquistan, Arabia entre otros países, pasaron a ser parte del pasado después de una retaliación de una facción extremista judía. Recuerdo que por meterse en donde no les importaba casi toda la costa oeste de los Estados Unidos (incluyendo Mexicali que formaba parte de los estados de México que se anexaron a EU después del hundimiento de la Ciudad de México) desapareció bajo una nube atómica, cortesía de los Norcoreanos. Tres meses después, Corea del Norte dejó de existir, junto con su hermana del sur; esta última por un error en los cálculos de las magnitudes de las bombas que se usaron.

Hoy, sabiendo que el lugar donde nací y crecí ya no existe, que casi toda mi familia y amigos ya no existen, y viviendo en un lugar alejado de la civilización. No sé si agradecer por estar vivo y con salud día a día o maldecir por haber sobrevivido y haber año tras año las más crudas demostraciónes de lo que llamo naturaleza humana...

5 comentarios:

Njkolas dijo...

Wow, qué fantasioso

Njkolas dijo...

Ojalá todo fuera tan simple y peliculesco...

comixgex dijo...

Confirmo nuevamente que siempre estara presenta la naturaleza de destruccion en el hombre. Mejor siga leyendo la ciencia ficcion que crea Isaac Asimov.

LR dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
E dijo...

Quizá no como dices, pero algo me dice que para allá vamos...