¿Tarde?

Hoy me levanté tarde (para variar), bajo mis cobijas calientitas (aunque completamente solo U.U), y, entre otras cosas me di cuenta que soy medio imprudente además de inconsciente, ya que como verán, tengo una cobija eléctrica, muy chida por cierto, entonces, me levanté, y antes de salir para ir a trabajar, me lavé las manos (con agua helada, por cierto) y me acordé de que el cable de la cobija seguía conectado a la corriente, entonces fui y lo desconecté ¡con la mano mojada!. O sea, no manches, fué bien gracioso porque no recordé que tenía la mano mojada hasta que estaba agarrando el cable, justo antes de jalarlo de la corriente.

Creo que estoy peor de lo que creí (no en cuestiones de enfermedad), jajaja. Tengo que sacarme esto de la cabeza ¡YA! y mandar al demonio todo esto que estoy sintiendo, es malo para mi salud mental.

Odio los nopales, los odio con odio chilango (es más chido que el odio jarocho, ese del ratón Crispín), odio su sabor, cómo se siente cuando los masticas, su olor, ¡¡guácala!! Ya perdí la cuenta desde la última vez que comí un nopal.

Saludos desde el más acá.